Quizás en determinadas ocasiones, autoengañamos a nuestro ser con aquella frase; que se convierte únicamente en una trampa para jamás volver a levantarnos, para sumirnos en ese dolor absurdo del que no queremos deshacernos jamas. 

NO HEMOS CAÍDO; es solo una respuesta absurda, como todo aquello que sin darnos cuenta transformamos en incoherente y poco viable para ser emprendido. Esos sueños que perseguías e inesperadamente perdiste sin apenas reaccionar en aquel punto de tu vida.

Como siempre he creído, la consciencia de nuestros procesos mentales a veces es nula, escapa y solo obtenemos la respuesta que es esa conducta que puede que no quieras desatar, ha surgido simplemente porque no tuviste  oportunidad de decidir. 

Nuestra mente avanza más rápidos que nosotros y en consecuencia el raciocinio es escaso