Es cierto, en algún momento todos nos comportamos de una forma egoísta, lo que nos conlleva a mentir, a sacar palabras que no se corresponden con la realidad de uno mismo.
Con ello podemos encerrar miles de fantasmas albergados en nuestro inconsciente, fantasmas que rebotan una y otra vez, intentando salir de ahí, con intenciones de romper cada una de nuestras debilidades, cada uno de nuestros tormentos diarios.
La envidia, la envidia por algo o por alguien, la envidia de pensar que nosotros nunca lo poseeremos, hace romper con nuestros esquemas morales si es que los tenemos, y aprovechamos para causar la aniquilación del objeto cuyos intereses propios posee, con tal de equilibrar ese sentimiento desbocado, ese sentimiento que se escapa al control de nuestra mirada.
Y luego viene la mentira, la forma de romper con la percepción de la imagen que hemos adquirido.
A yo??
No yo no hago eso?
Yo no miento, si yo te apoyo,no quiero nada para mi, solo mi importa tu bienestar, solo quiero aconsejarte.
¿A caso crees que yo puedo estar haciendo aguas tus esfuerzos?
Te equivocas..
Si señores.. nunca somos los malos, nunca nos equivocamos, podemos estar haciendo las mayores putadas pero nunca las asumimos.
Claro esta, que de todo hay en " la viña del señor".
