martes, 30 de diciembre de 2014

Programación enfermiza

Nombramos enfermedad como algo molesto; que duele y es visible para el resto de las personas. Es el dolor de miles de personas; el causado por algo que no se palpa , que no se detecta en los test médicos ni se soluciona o sana con medicamentos milagrosos.

Son las emociones desgarbadas e incontrolables de sucesos que aveces escapan a nuestro control.Se disuelven o transforman ,te enseñan a vivir, a pensar; a descubrirte a ti mismo.

Tener emociones no es motivo de enfermedad ; solo del propio ser, de la vida. moldeable como la plastilina y en ocasiones difícil de retornar o llevar a otro estado, así es la mente. 
En determinadas ocasiones somos nuestros propios enemigos, y se refleja en el daño que somos capaces de infligirnos.Acciones como la autofragelación,rumiación,depresión, culpabilidad; en ciertas ocasiones; y afirmándolo penosamente; son solo los resultados de una programación corrupta en nuestra psique, un modelo implantado por vivencias o pautas que resultaron exitosas en el pasado y en la actualidad , difíciles de modificar. 

Es  la gran diferencia que nos separa de las computadoras;nuestra programación no es instantánea, sino continua e interminable durante nuestro tiempo de vida útil.Si varias veces obraste desde una determinada posición en cierto conflicto y obtuviste resultados positivos,aun así; sin ser un método totalmente infalible, posiblemente vuelvas adoptar este mismo mecanismo y veras reducidas otro tipo de posibilidades, que aborden un resultado mejor o en definitiva, el adecuado. Todo esto hace comprensible la  frase repetida hasta la saciedad; "Aprendemos a base de varios y continuos golpes".  

Aunque a veces ,en este camino de  aprendizaje; por si no era complicado ya lidiar con uno mismo, aparecen vulnerabilidades ,que en este tipo de momentos a enfrentar; crean incapacidades o temores que antes no aparecían en la persona. ¿ a que o a quien se dirige el temor?, básicamente a uno mismo; a obrar de la misma forma que se utilizo en el pasado y hundió las posibilidades de respirar.

miércoles, 24 de diciembre de 2014

Irresponsables

Truncado; escondido de mi mismo y de los ojos que no me reconocen. Sentí aquel temblor que atravesó todo mi cuerpo y frenó los pensamientos coherentes, los que entran en el rango normal de la conciencia, los que dan margen a nuestra respiración. 

Puedes maldecir a las personas por haberte llevado por una senda inapropiada, a tus familiares por que te transmitieron un gen defectuoso, a tu mala praxis de esa droga que estropeo tu química cerebral irremediablemente... pero no serás capaz de encontrar la respuesta en ti mismo, la responsabilidad personal de lo que sientes, de lo que debes hacer con tu propia piel en el presente.

Amoldados a la cultura del "no es MI culpa", no encontraremos la solución ni el camino que nos guíe hacia  lo que definimos como PAZ dentro de nuestro propio cuerpo, dentro de esa vida que avanza a contra reloj sin detenerse.
No te detengas, la vida es breve, única y solo tú el que decide si malgastarla o exprimirla.



jueves, 4 de diciembre de 2014

Más allá del olvido

Los recuerdos, las memorias ;aquellos caracteres que conforman la totalidad de nuestra persona; potentes y a veces frágiles;conscientes de cada unos de los cambios; los que perseguimos o buscamos. Siempre son huellas casi indelebles, aunque no para todos. 

Después de atravesar una larga vida con todos aquellos sucesos que esta alberga eres capaz de alcanzar una sabiduría casi plena de ti mismo con la que eres capaz de sentir ese regocijo cuando te encuentras solo.
Es temor lo que describo al imaginar la fuga de todas esas marcas en nuestra persona; olvidarte de ti mismo en el sentido de  identidad;  no obtener emoción ni sentimiento alguno ante el intento de estimulación de aquellos que te rodean; aquellos que aún no pueden creerse que esto te haya podido suceder a ti.

 La persona que jamás olvidaba dar un abrazo, un beso o una caricia ; además del enorme sustento cuando el mundo se caía . Olvidó quien era , porque estaba en ese lugar , o quién eran  las personas que le intentaban recordar para que servían esas piernas que aún conservaba.
Recuerdo; a veces , aquel tiempo remoto ; quizás en el quinto de mis primeros años; cuando intentabas calmar nuestra sed con una jarra de agua al acostarnos, cuando nos susurrabas lo  mucho que nos querías y cuando calmabas mi agitación en medio de la noche al descubrir que mis padres no estaban en su dormitorio.
Fue uno de los últimos días; en los cuáles aún mantenías tu verdadera esencia y  sonreíste sabiendo quien era yo , cuando te encontrabas en el hospital después de aquella operación. Aquel lugar... , situación... de ese conjunto de los que comenzaban a ser extraños para ti.

Aun así todo no había acabado ; con el dolor en tus entrañas e intentando mantener la cabeza firme cuando hablabas con personas que ya no conocías; cuando tu nieta crecía y la intentabas cuidar como habías hecho con el  resto de nosotros; cuando intentabas ayudarme con aquellas operaciones aritméticas; sumas,restas, divisiones...Describo una bondad absoluta que demostrabas siempre;  aunque  bajo un triste y limitado estado psicológico  te encontrabas.

Supongo que es verdad lo que se dice del retroceso hacia la edad temprana cuando nos hacemos mayores.
Es entonces cuando mis recuerdos reflejan el continuo cuidado que toda tu familia manifestó en todos esos años.Aún se apreciaban  las sonrisas en tu rostro cuando cuando utilizábamos tu nombre con las esperanzas de una respuesta, esto ya no era así; habías olvidado que era hablar, y llegados a este punto nuestros intentos por enseñarte hacerlo de nuevo ; fueron en vano. Pocas semanas antes de tu despedida ;recuerdo tomar tu mano con energía y esperanzas de que una parte de ti , pudiese sentir mi compañía, mi afecto; mis ganas de decirte que siempre te recordaría.




lunes, 1 de diciembre de 2014

¿Perdidos?

Perdido; como el sol cuando no encuentra su horizonte para alzarse sobre el mismo, como aquellos que esperaban algo de aquella promesa que aun no se ha cumplido.

Intentas convencer al destino cada día para que su actuación sea favorable en tu posición; intentas colocar parches sobre todos aquellos posibles descosidos; todo es cuanto mejor has creado. Te susurras a ti mismo cada día cuál será tu nuevo reto hoy, o quizás mañana... cuál será la ilusión que te impulse a otorgar tu mejor sonrisa al mundo.

Hoy comprendí que a veces no existen nuevos propósitos, pero no es razón para llorar; para pensar que te has perdido en el camino, hoy atendí a lo que poseo; a lo que conseguí y a lo que aun conservo. No hay razón para sentir desesperación, no hay razón para olvidar que otros lo pierden todo y aun así siguen adelante.