Apenas pude sentir y percibir ese azul del cielo que te llena de esperanzas, de vida, de color y de sosiego... las sombras aislaron el avance y el oscuro color de los miedos mas temidos me absorbió sin tan siquiera preguntarlo.
Atravesé aquella silenciosa calle en el bullicioso y caluroso verano; esperé estímulos de algo que me ayudase a reaccionar; a no perder mi ser en aquel doloroso infierno que comenzaba a penetrar en mí.
Jamás la sensación de crueldad había sido tan vivida en mi propia carne, aquel momento me hizo replantear el verdadero significado de 'un duro golpe' en múltiples y pasadas ocasiones de mi corta historia en este mundo..
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