Sueños de invierno, colmados de esperanza y visiones de futuro….
A
veces despiertas con el rumor de la mañana invitándote a emprender esos
proyectos que siempre habías soñado, pero jamás pusiste en perspectiva,
otras veces despiertas con el clamor de tus temores invitándote a no
deshacerte de esa colcha protectora que nada entiende sobre luchas
diarias. Vivimos en un continuo abanico de emociones que varían
gradualmente, vida no es estática y ese dinamismo es precisamente la
característica más marcada de…– bueno – otra vez más; la vida.
Conservar
un estado de felicidad perpetua es solo visto en la ficción, pero la
realidad también nos muestra que la mayor parte de las veces nada es
para siempre y que al igual que los sucesos positivos y su impacto no
duran para siempre , lo mismo ocurre con lo negativo. Posiblemente todo
aquel que haya llegado hasta aquí tiene la típica frase
resonando en su cabeza : no hay mal que 100 años dure.