Cuando la marea es alta y amenaza con llevarte al fondo del mas de tus temidos enemigos, recuerda cual es tu naturaleza, cual es aquella fortaleza que te permite recobrar oxigeno y fortaleza para hacer frente a esa tenebrosa corriente.
Nunca permitas que las fuerzas externas debiliten la luz que siempre te acompaña, aquella luz que mantiene tu interior indestructible e impenetrable.
No permitas ni aceptes que alguien posea mas conocimiento acerca de ti que el que tu mismo albergas.
Ten siempre presente que tu realidad es solamente tuya y no esta sujeta a deformaciones provocadas por los seres que te rodean, mantén tu verdad siempre firme e indestructible.